La cabra Flora genera opiniones divididas
Una bienvenida inesperada
Belinda ha sido nuevamente protagonista en redes sociales, esta vez por un motivo muy peculiar. La cantante sorprendió a sus seguidores al presentar a su nueva mascota, una pequeña cabra llamada Flora, quien ya forma parte de su vida cotidiana. El anuncio fue hecho a través de una serie de videos compartidos en su cuenta oficial de Instagram.
En las grabaciones, puede verse cómo la cabra Flora es mostrada interactuando con los miembros de la familia de la cantante, en especial con su padre, Ignacio Peregrín, quien aparece acariciándola mientras la cabrita se acomoda tranquilamente sobre sus piernas. En uno de los clips, Belinda escribió: «Hola, Flora, bienvenida a tu casa», dando a entender que la nueva mascota permanecerá a su lado de forma indefinida.
Reacciones encontradas en redes sociales
La decisión de tener una cabra como mascota ha sido recibida con opiniones mixtas. Mientras algunos celebran la ternura del animal, otros han cuestionado si su tenencia está permitida por la ley. Los comentarios no se hicieron esperar, generando un debate que rápidamente se extendió por distintas plataformas digitales.
¿Es legal tener una cabra como mascota?
Contrario a lo que muchos piensan, en México las cabras no son clasificadas como animales exóticos. De acuerdo con la legislación vigente, se consideran animales domésticos, por lo que su tenencia no está prohibida. Siempre y cuando se les brinden los cuidados adecuados y un entorno propicio para su desarrollo, no se incurre en ninguna falta legal al adoptarlas como parte del hogar.
Un estilo de vida no convencional
Belinda, conocida por su estilo único y decisiones poco convencionales, ha vuelto a acaparar la atención mediática. Su cercanía con los animales y su deseo de integrar a Flora a su vida diaria han sido evidenciados con naturalidad y entusiasmo en sus redes. No es la primera vez que la artista comparte detalles íntimos con sus seguidores, pero esta vez lo ha hecho con un toque rural y tierno.
Con esta elección, Belinda no solo ha abierto el debate sobre las mascotas inusuales, sino que también ha recordado que, con amor y responsabilidad, los límites del concepto de “familia” pueden extenderse más allá de lo convencional.